La mujeres de la tribu himba bailan para celebrar la llegada de la menstruación de una joven. La poligamia está admitida y las mujeres casadas pueden mantener otras relaciones, si su marido les da permiso.
El río Kunene hace de frontera entre Namibia y Angola. En esta región llamada Kaokoland, viven los himbas, una tribu ganadera muy interesante.Este pequeño poblado se llama Opembe.
Las casas las construyen las mujeres, y cuando se deterioran también las arreglan ellas. Los himbas además de ganaderos, son unos maestros en el arte de relacionarse.
Nada es más importante para ellos que sus animales, y la belleza. Las vacas las ordeñan las mujeres.
Como a la mayoría, a los himba les gusta estar guapos. Las jóvenes se adornan con brazaletes y tobilleras, hasta que les llega la menstruación. –el esuko- en su lengua. El ohumba, es el adorno mas apreciado y la consiguen por medio de intercambios con otras tribus, las Zemba y las Tuwa.
Pero como de verdad disfrutan, es haciendo arte en su propio cuerpo. Y el peinado no podía ser menos, se hacen y deshacen las trenzas cada dos años.
Para obtener el tinte, machacan unas piedras muy ricas en hierro, de ahí sacan un polvo ocre que mezclan con manteca y obtienen una pasta rojiza, con la que se untan el pelo y el cuerpo. Además de una función estética les protege del sol y de las picaduras de los insectos.
Lo que no hacen es bañarse a menudo. En realidad, las mujeres solo se bañan una vez en su vida, el día de su boda.
A komané le ha llegado la menstruación, y por ese motivo se celebra un baile. Se supone que ya puede casarse. Y son los padres los que eligen a su futuro marido.