La libélula, tanto en forma de ninfa como en edad adulta, es el terror de las charcas, donde captura todo tipo de insectos.
La libélula es el terror de las charcas. Las libélulas adultas, son también activos cazadores que capturan al vuelo todo tipo de insectos, incluso a otros congéneres.
Mientras que las libélulas adultas voladoras tienen una longevidad media de entre 8 y 60 días, algunas especies pueden pasar los primeros 6 años de sus vidas bajo el agua, en forma de ninfas.
La feroz ninfa de libélula detecta a sus víctimas por el movimiento, se aproxima hasta tenerlas a tiro y las atrapa extendiendo su mandíbula inferior retráctil, en un fulminante y certero ataque.
Alimentándose vorazmente de todo tipo de larvas, renacuajos e insectos acuáticos, pueden alcanzar hasta los 5cm, por lo que mudará su exoesqueleto más de 15 veces mientras crece, antes de emerger a la superficie y convertirse en insecto volador.
Estos efectivos depredadores ayudan a controlar la población de otros insectos de incubación acuática, tanto bajo el agua como en la superficie.